viernes, 30 de septiembre de 2011

Los rompehielos superan la parte mas peligrosa de su ruta


Los rompehielos rusos Krasin y Almirante Makárov, que participan en el rescate de los buques atrapados en el mar de Ojotsk desde el pasado mes de diciembre, superaron la parte más difícil de su ruta hacia las aguas seguras. Están remolcando al buque factoría Sodrúzhestvo y el congelador Béreg Nadezhdi.

Los barcos emitieron una señal de socorro el 30 de diciembre al ser bloqueados por los hielos. Ambos cargueros solicitaron el apoyo de los equipos de rescate para ser llevados a las aguas que ya no presentan amenaza.

ITAR-TASS informa, que el rescate fue y todavía sigue siendo dificultado por las condiciones meteorológicas con el viento fuerte, unos 30 metros por segundo, y las temperaturas de unos -20 grados centígrados.

Pese a esas inclemencias, los rompehielos lograron remolcar con éxito a sus tutelados por la distancia más dura de unas 10 millas, donde se observa una presión de hielos máxima. Ahora al convoy le queda pasar unos días más rumbo al norte del mar de Ojotsk, donde se sitúa el área segura.

Junto a Sodrózhestvo y Béreg Nadezhdi quedaron atrapados también el barco científico Profesor Kiesewetter, y los buques Tumnin y Óstrov Karaguinski, con una tripulación sumada de unas 550 personas.
Este numeroso grupo de embarcaciones fueron varados por los hielos flotantes en una región del golfo de Sajalín. La situación, aunque emergente, no presenta peligro para los tripulantes, ya que disponen de alimentos, medicamentos y todo lo necesario para la vida habitual.

Documental: Aviones Secretos Sovieticos de la Segunda Guerra Mundial

Documental de canal historia sobre los extraños aviones utilizados por el ejercito sovietico durante la segunda guerra mundial

viernes, 23 de septiembre de 2011

Piotr Chaikovski


Piotr Ilich Chaikovski es uno de los compositores rusos más queridos. Su música es famosa por su fuerte emoción y su destreza técnica. Sus estrictos hábitos de trabajo lo ayudaron a asegurar su atractivo duradero. Su profunda sensibilidad se refleja en su música con la creación de melodías suntuosas que enamoran a los oyentes durante más de un siglo.

Chaikovski nació el 7 de mayo de 1840 en Vótkinsk, una pequeña ciudad en los Urales (actualmente esta ciudad se encuentra en la República de Udmurtia) donde su padre se desempeñaba como director de una fábrica minera. Los padres del futuro compositor eran aficionados a la música y en casa a menudo pasaban conciertos de músicos amateurs. Alrededor se oían canciones de los lugareños. Como escribió el mismo Chaikovski, él “se crió en andurriales y desde la niñez se empapó de la belleza de la música popular rusa”, lo que más tarde se reflejó en sus obras.

La vida personal de Chaikovski era turbulenta desde el principio. Cuando joven, Chaikovski sufrió mucho al perder a su madre a la edad de 14 años y se vio forzado a enfrentarse a la atmosfera fría del internado militar. Mientras se encontraba allí, el joven Piotr rehuía del mundo violento encontrando consuelo en la música. Después de escuchar “Don Giovanni” de Mozart, Chaikovski decidió dedicar su vida a la música.


En 1843 los padres de Chaikovski contrataron a la tutora francesa Fanny Dürbach. Se cree que su amor y afección por su tutelado le compensaron a Chaikovski su madre Alexandra, descrita por un biógrafo como una mujer fría, infeliz y distante que no estaba dispuesta a manifestar afección física. Sin embargo, otros biógrafos afirman, que Alexandra consentía a su hijo.

Dotado de un talento precoz para la música, Piotr empezó a tomar clases de piano a los cinco años con una maestra local, María Pálchikova, y dentro de tres años ya podía leer música al mismo nivel que su maestra.

En 1850 su padre fue nombrado director del Instituto Tecnológico de San Petersburgo. Allí el joven Chaikovski recibió educación en la Escuela de Jurisprudencia. Aunque la música no se consideraba una alta prioridad en su programa de estudios, Chaikovski frecuentaba regularmente la ópera y el teatro junto con sus compañeros de clase. Estaba fascinado por las obras de Rossini, Bellini, Verdi y Mozart. La única educación musical que recibió en la Escuela fueron las clases de piano dadas por Franz Becker, un fabricante de pianos que visitaba su casa de vez en cuando siendo un simbólico maestro de música.

La madre de Chaikovski murió de cólera en 1854. Esa noticia afectó mucho al joven Chaikovski, que en aquel entonces tenía 14 años. No podía componer por la pérdida de su madre y reaccionó acudiendo a la música. Pasado un mes de la muerte de su madre, Chaikovski hizo sus primeros intentos en la obra: un vals en su memoria.

El padre de Chaikovski alentaba interés hacia la música y pagó pos sus estudios, que comenzaron en 1855, a Rudolph Kundinger, un profesor de piano muy conocido de Nuremberg. Sin embargo, cuando el padre de Chaikovski consultó a Kundinger con respecto a las perspectivas de una carrera musical para su hijo, el maestro escribió que nada presagiaba que Chaikovski pudiera ser un compositor, ni siquiera un buen intérprete. A Chaikovski le dijeron que dejara sus estudios e intentara encontrar un puesto en el Ministerio de Justicia.

Chaikovski se graduó de la Escuela de Jurisprudencia el 25 de mayo de 1859 obteniendo el rango de asesor titular, el escalón más bajo del servicio civil. El 15 de junio entró a trabajar en el Ministerio de Justicia. Seis meses después le ascendieron a asistente subalterno en su departamento y dentro de dos meses obtuvo el cargo de asistente superior.

En 1861, conoció por casualidad sobre las clases musicales que organizaba la Sociedad Musical Rusa. Según Nikolái Kashkin, amigo suyo, a Chaikovski le gustaba competir con su primo aficionado a la música que era un oficial del regimiento de granaderos a caballo. Una vez el primo fanfarroneó que podía hacer una transición de una tecla a cualquier otra en no más de tres acordes. Chaikovski aceptó el desafío y perdió. Así supo que su primo lo había aprendido en la clase de teoría musical de Nikolái Zaremba en la Sociedad Musical Rusa.

Entonces Chaikovski enseguida empezó a tomar las clases de Zaremba. El año siguiente cuando Zaremba entró a la facultad del nuevo Conservatorio de San Petersburgo, Chaikovski siguió a su profesor e ingresó allá aunque no había dejado su carrera en el ministerio hasta que su padre consintió en apoyarle. De 1862 hasta 1865, Chaikovski aprendió la harmonía, el contrapunto y la fuga en las clases de Zaremba. La instrumentación y la composición le enseñó el director y fundador del conservatorio de San Petersburgo, Antón Rubinstein que estaba impresionado por el talento de Chaikovski.

Mientras Chaikovski cursaba estudios en las clases de Zaremba, el crítico Vladímir Stasov y el compositor Mili Balákirev formaron una escuela de música nacionalista y crearon el denominado “Puñado Poderoso” (conocido también como “El Grupo de los Cinco”) en San Petersburgo. Como Chaikovski era el mejor estudiante de Antón Rubinstein, se asoció con el Grupo de los Cinco, aunque no compartía sus ideales creativos. En 1867, Chaikovski inició una relación laboral con Balákirev que terminó con la creación de la fantasía-obertura Romeo y Julieta.

Chaikovski permanció dudoso acerca de la música y los objetivos de “Los Cinco”. Su relación con ellos siempre fue cordial, pero nunca estrecha. Chaikovski mantuvo relaciones cercanas con Alexánder Glazunóv, Anatoli Lyádov y, por lo menos aparentemente, con Nikolái Rimski-Kórsakov.

Después de que Chaikovski se graduó, el hermano menor de Antón Rubinstein, Nikolái, le propuso entrar a trabajar como profesor de harmonía, composición e historia de la música en el Conservatorio de Moscú. Chaikovski con mucho gusto aceptó, ya que su padre se había jubilado y perdido sus propiedades.

En 1866 Chaikovski llegó a Moscú. En aquel entonces no era nada más que autor de muchísimas obras, compuestas durante sus estudios en el Conservatorio de San Petersburgo. Pero dentro de muy poco tiempo Chaikovski se convirtió en uno de los músicos más destacados de Rusia, su fama se extendía y poco a poco su música se hizo conocida en Europa. Durante ese tiempo fue creada la Primera Sinfonía titulada “Sueños del Invierno” inspirada en las vivencias del invierno que había conocido, cuando junto con sus padres atravesaba las llanuras de Rusia.

Siendo profesor del conservatorio, Chaikovski consagraba mucho tiempo a la docencia. Cientos de estudiantes pasaron por su clase, entre ellos el talentoso pianista Serguéi Taneev, al que Chaikovski dedicó su fantasía sinfónica “Francesca da Rimini”. Además Chaikovski fue uno de los primeros autores de libros de textos y programas de estudios musicales de Rusia. Tradujo al ruso algunos de los materiales de teoréticos europeos.

Al llegar a Moscú, Chaikovski como compositor empezó a crear música prácticamente en todos los géneros. Compuso operas, sinfonías, cuartetos, piezas de conciertos para diferentes instrumentos, música para piano, romances y mucho más. A menudo componía obras por encargo para varios eventos que se celebraban en Moscú.

Una de las características de su creación en este período es el uso del folclore musical de diferentes países. Así, utilizó los cantos de serbios en su obra “Marcha Eslava”. Las melodías populares ucranianas se mostraron en su Primer Concierto para Piano con Orquesta. En el ballet “El Lago de los Cisnes” Chaikovski incluyó una suite compuesta de bailes de pueblos diferentes.

La cima de su creación dentro de su período moscovita fue la composición de la Cuarta Sinfonía y la ópera “Eugenio Oneguin”, primera ópera de Chaikovski basada en la obra homónima del poeta y escritor A. Pushkin. Este tiempo coincidió con su matrimonio, que primero parecía un caso clásico de imitación al arte. Una de sus estudiantes en el Conservatorio de Moscú, Antonina Miliukova, empezó a escribirle cartas apasionadas mientras Chaikovski trabajaba en “la Escena de la Carta” de su ópera “Eugenio Oneguin”. En ese momento Chaikovski tenía 37 años y pensó que ya era tiempo de casarse. Se casaron el 18 de julio de 1877. Sin embargo, pocos días después de la boda Chaikovski se arrepintió muchísimo de aquella decisión. Comprendiendo que su matrimonio era un desastre, Chaikovski se culpaba a si mismo. Su desespero era tan grande que estuvo al borde del suicidio, supuestamente intentó ahogarse en las aguas frías del rió Moscova. Cuando se recuperó de los efectos del mismo, Chaikovski abandonó Moscú y se fue a San Petersburgo sufriendo una grave crisis psicológica.

La tensión mental y emocional que sufría el compositor debido al fracaso de su matrimonio no deterioraron su creatividad, más bien, la aumentaron. A pesar de algunas interrupciones Chaikovski alcanzó a terminar unas de sus mejores obras, la Cuarta Sinfonía y la ópera “Eugenio Oneguin”.

Entre las personas atraídas por la música de Chaikovski estaba Nadezhda von Meck, viuda de un rico empresario de ferrocarriles ruso. Von Meck le encargó algunas piezas musicales pequeñas. Chaikovski por su parte la pidió que le subsidiara el coste del matrimonio y los gastos básicos. Luego von Meck sugerió pagar a Chaikovski un subsidio anual de 6,000 rublos para evitar cualquier vergüenza de pedir financiamiento en el futuro. Eso le permitió a Chaikovski retirarse del conservatorio en octubre de 1878 y concentrarse en la composición.

Von Meck y Chaikovski intercambiaron más de 1,200 cartas entre 1877 y 1890. Los detalles de aquella correspondencia eran extraordinarios para dos hombres que nunca se conocieron en persona y estaba lejos de ser amantes. Chaikovski confiaba a su patrona algunas de sus actitudes hacia la vida y detalles del proceso de creación que nunca compartía con los demás.

Los últimos 15 años de la vida de Chaikovski está marcada por el enorme auge de su creación y su fama mundial. Chaikovski fue el primer compositor ruso mundialmente reconocido en vida. Durante este período compuso suites de orquesta, óperas inspiradas en temas históricos (“La Doncella de Orleans”, “Mazeppa”). En 1890 creó su genial ópera “La Dama de Picas”. El último año de su vida Chaikovski compuso su Sexta Sinfonía.

Chaikovski probó dedicarse también a la dirección de orquesta y poco a poco comenzó a hacerlo de forma regular. A finales de 1887 y a principios de 1888 realizó su primera gira por Europa como director de orquesta.

En 1891 Chaikovski visitó Estados Unidos dentro de una triunfante gira como director de orquesta interpretando sus obras. El 5 de mayo dirigió la orquesta de la Sociedad Musical de Nueva York que interpretó “La Marcha Eslava” en la inauguración oficial de la sala de conciertos Carnegie Hall de Nueva York. Luego siguieron sus interpretaciones de la Tercera Suite, el Primer Concierto para Piano y la Serenata para Cuerdas.

En 1893 la Universidad de Cambridge confirió a Chaikovski el título de Doctor Honorario de Música. Entre otros compositores honrados estaban Camille Saint-Saens, Max Bruch, Arrigo Boito y Edvard Grieg.

En 1885 el Zar Alejandro III le otorgó a Chaikovski la Orden de Santo Vladímir (de cuarta clase) lo que concedía al compositor el derecho a nobleza hereditaria. Aquel mismo año Chaikovski se estableció de nuevo en Rusia; primero en Maidánovo, cerca de Klin; luego en Frolóvskoye, también cerca de Klin, y finalmente en 1891 en Klin.

La vida del músico se interrumpió bruscamente. Llegó a San Petersburgo donde dirigió su Sexta Sinfonía, pero dentro de pocos días se enfermó de cólera y murió el 6 de noviembre de 1893. Chaikovski fue enterrado en San Petersburgo, en el Cementerio Tíjvinskoye en el Monasterio de Alexandr Nevski.

Tras su muerte, en 1984, por iniciativa de su hermano Modést, su casa en Klin fue convertida en museo. Esta casa guarda no solamente la memoria del gran compositor, sino también su archivo, sus bienes personales y su piano de cola que sigue sonando bajo las manos de eminentes músicos llenando la casa de sonidos de su música inmortal.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Observatorio de Púlkovo.


En 1839 se fundó el Observatorio de Púlkovo, equipado con el mayor telescopio de su tiempo.

El Observatorio astronómico de Púlkovo (en ruso, Пу́лковская Астрономи́ческая обсервато́рия) es el principal observatorio astronómico de la Academia Rusa de las Ciencias, y se encuentra a 19 kilómetros al sur de San Petersburgo, sobre las colinas de Pulkovo (a 75 msnm). Forma parte, con el código 540-008 , del lugar Patrimonio de la Humanidad llamado «Centro histórico de San Petersburgo y conjuntos monumentales anexos».[1]

El observatorio se inauguró en 1839.[2] En un principio, fue una creación del astrónomo ruso-germano Friedrich Georg Wilhelm von Struve, quien se convirtió en su primer director[2] (en 1861, su hijo Otto Wilhelm von Struve le sucedió). El arquitecto fue Aleksandr Brullov. El observatorio fue equipado con instrumentos de último modelo, uno de ellos el mayor refractor de 38-cm del mundo. La principal línea de trabajo del observatorio consistió en determinar las coordenadas de estrellas y constantes astronómicas, como precesiones, nutaciones, aberraciones y refracciones, y también descubrir y medir estrellas dobles. Las actividades del observatorio también se han relacionado con el estudio geográfico del territorio de Rusia y el desarrollo de la navegación. Los catálogos de estrellas, conteniendo las posiciones más precisas de 374, y luego 558 estrellas, se hicieron para los años 1845, 1865, 1885, 1905 y 1930.

Para el 50.º aniversario del observatorio, se construyó un laboratorio astrofísico con un taller mecánico y se instaló el refractor más grande del mundo de 76 centímetros. La investigación astrofísica cobró velocidad con el nombramiento de Feodor Bredejin como director del observatorio en 1890 y la transferencia de Aristarj Belopolski desde el Observatorio de Moscú, un experto en espectroscopia astronómica e investigación solar. En 1923, instalaron un gran espectrógrafo de Littrow y en 1940 un telescopio solar horizontal, fabricado en un taller de Leningrado.

Después de haber recibido un astrógrafo en 1894, el observatorio comenzó su trabajo de astrofotografía. En 1927, el observatorio recibió un astrógrafo de zona y con su ayuda los astrónomos rusos catalogaron las estrellas de las zonas celestes próximas al polo. La observación regular de los movimientos de los polos celestes comenzaron con la construcción del telescopio zénit en 1904. En 1920, el observatorio comenzó a transmitir el tiempo exacto por señales de radio.

El observatorio participó en el trabajo geodésico básico, principalmente midiendo grados del arco del meridiano desde el Danubio hasta el Océano Ártico (hasta 1851), y en triangulación de Spitsbergen en 1899-1901. Los hidrógrafos y geodésicos militares solían trabajar en el observatorio como internos. El meridiano de Púlkovo, que pasa por el centro del edificio principal del observatorio y está ubicado a 30º 19,6' al este de Greenwich, era el punto de partida de todos los anteriores mapas geográficos de Rusia.

Para observar las estrellas meridionales que no podían verse en la latitud del observatorio, los científicos organizaron dos afiliados. Uno de ellos era una estación astrofísica en Simeis, ciudad de Crimea (Simeis), que había sido organizado sobre la premisa de un observatorio privado presentado al observatorio de Púlkovo por un amante de la astronomía, N. S. Maltsov en 1908. El otro afiliado del observatorio de Púlkovo fue una estación astrométrica en Nikolaev, un observatorio anterior del departamento de Marina (hoy, observatorio astronómico de Nikoláev).

La plantilla del observatorio se vio muy afectada por la Gran Purga y muchos astrónomos de Púlkovo, incluyendo al director, Borís Gerasimóvich, fueron arrestados y ejecutados a finales de los años treinta.

Durante el sitio de Leningrado (1941-1944), el observatorio se convirtió en objetivo de fieros ataques aéreos alemanes y bombardeos de artillería. Todos los edificios quedaron completamente destruidos. En condiciones dramáticas, los instrumentos fueron salvados y almacenados sanos y salvos en Leningrado, incluyendo el mayor telescopio del mundo, así como una parte significativa de la única biblioteca con estritos e importantes obras desde el siglo XV al XIX. El 5 de febrero de 1997, casi 1.500 de los 3.852 libros fueron destruidos por un incendio intencionado y el resto de los artículos de la biblioteca resultaron dañados por las llamas, el humo o el agua.

Incluso antes del final de la guerra, el gobierno soviético tomó la decisión de restaurar el observatorio. En 1946, comenzaron la construcción después de haber limpiado el terreno. En mayo de 1954, el observatorio fue reabierto, y no sólo había sido restaurado sino también ampliado considerablemente en lo que se refiere a instrumentos, empleados y temas de investigación. Crearon nuevos departamentos, como el Departamento de Radioastronomía y el Departamento de Elaboración de Instrumentos (con su propio taller óptico y mecánico). Los instrumentos antiguos supervivientes fueron reparados, modernizados y utilizados de nuevo. También instalaron nuevos instrumentos, como un refractor de 65 cm, dispositivo meridiano horizontal, un telescopio polar fotográfico, un gran telescopio zénit, interferómetro estelar, dos telescopios solares, coronógrafo, un gran radiotelescopio y todo tipo de instrumental de laboratorio. La estación Simeis se convirtió en parte del nuevo Observatorio astrofísico de Crimea de la Academia Soviética de las Ciencias en 1945. También construyeron la Estación Astronómica de la Montaña Kislovodsk y un laboratorio en Blagovéshchensk. El observatorio organizó muchas expediciones para determinar las diferencias de longitud, observar pasajes de Venus y eclipses solarees, estudiando el astroclima. En 1962, el observatorio envió una expedición a Chile para observar las estrellas de los cielos meridionales.

domingo, 18 de septiembre de 2011

MRK-27 BT


El uso del nuevo robot de guerra ruso, que se dirige a distancia, denominado MRK-27 BT, puede reducir el número de bajas humanas, opinan los expertos.

Esta maquinaria de guerra no necesita soldados, solo basta una persona que a un kilómetro de distancia pueda operarla desde un computador. El robot incluye dos lanzadores de cohetes, otros dos de granadas, una ametralladora con 600 balas y 6 granadas de humo. Fue desarrollado en los talleres de la Universidad Estatal Técnica de Moscú junto con otros denominados 'soldados robot'.


Alexánder Glújov, subjefe de la oficina especial de proyectos tecnológicos de robótica aplicada de la Universidad Estatal Técnica de Moscú Báuman, comenta: “Esta máquina puede elevar su plataforma de armas hasta dos metros de altura. Cambiar su posición con respecto al terreno y el blanco con un ángulo de alzamiento de hasta 75 grados, lo que le permite disparar contra objetivos elevados o aéreos, por ejemplo”.

Los diseñadores de estos ingenios esperan que muy pronto formen parte del ejército ruso.


Además estos equipos pueden trabajar coordinados. Como se puede observar en el vídeo adjunto, al robot grande, equipado con armamento pesado, le está ayudando el otro, mucho más pequeño. El último capta el entorno mediante el registro de audio y vídeo y acumula la información necesaria para que el más grande pueda ocuparse de las acciones de combate: a través de sus potentes cañones es capaz de abatir tanques y maquinaria enemiga.

Actualmente los robots como el sistema de defensa militar están obteniendo más y más popularidad en el mundo. Algunos hasta creen que pronto los militares humanos podrían ser sustituidos por ellos.

“Este método permite reducir la cantidad de pérdidas humanas entre los soldados de las subdivisiones terrestres ofensivas y defensivas”, cree Glújov. “Y además, realizar maniobras de táctica.”

Es así como los especialistas de la Universidad Estatal Técnica de Moscú de Báuman, han trabajado arduamente para implementar estos modelos.

Los instructores informan que estos aparatos ya atrajeron la atención de los especialistas extranjeros. Sus creadores sostienen que el robot permite continuar las funciones que por su gran dificultad el hombre no puede realizar. La robótica también está presente en varios aspectos de la vida cotidiana desde hace ya muchos años. Se ha comprobado que pueden trabajar en medio de la contaminación radiactiva y química.

Si bien pueden ser utilizados con fines bélicos, entre los expertos crece la opinión de que cada día se convierten más en instrumentos para mantener la paz y la seguridad.

La flota rusa del Pacífico


La península rusa de Kamchatka acoge estos días las maniobra navales de la Flota rusa del Pacífico (FP) de más envergadura de los últimos años.


En los ejercicios, que durarán dos semanas, participan cerca de 10.000 efectivos, aviones de combate, helicópteros y una escuadra encabezada por el crucero portamisiles 'Variag', el buque insignia de la FP que disparará diferentes tipos de armas.

Pese a que el arma principal del 'Variag' son los misiles de crucero (razón por la que se lo denomina con frecuencia 'cazaportaaviones'), en los presentes ejercicios su misión principal consiste en abatir los misiles dirigidos contra la escuadra por mar y aire. En el marco de estas maniobras, los buques de la FP realizarán prácticas de tiro con misiles, torpedos y artillería, y efectuarán desembarco de tropas.

martes, 6 de septiembre de 2011

Oymyakon, el lugar mas frío de la tierra

Oymyakon, el lugar mas frío de la tierra.


Localizado en el noreste de la República de Saja (Yakutia), éste pequeño poblado de la Siberia Rusa cuenta con algo más de 2.200 habitantes donde viven una vida un tanto particular y que está muy lejos de las comodidades de las grandes ciudades.

En Oymyakon la leche se reparte en estado sólido, en lugar de agua corriente se utilizan bloques de hielo y los escolares asisten a clases sólo si la temperatura no baja de los 52 grados bajo cero. Por ésta razón que la ciudad es conocida con el título de la ciudad más fría del mundo. De sólo pensar semejantes niveles de temperatura ya estoy temblando.


En esta ciudad siberiana donde su población resiste con tenacidad los fríos más extremos, el récord histórico se registró en 1926, cuando el termómetro marcó una temperatura de -72.1 grados Celsius. Y de hecho, durante los largos nueve meses de invierno en Oymyakon, es muy frecuente que el tiempo se mantenga alrededor de los 60 grados bajo cero.


Los habitantes de Oymyakon, en la república rusa de Yakutia, nacen, crecen, se reproducen, sueñan y mueren prácticamente congelados. Su localidad batió récord en 1926: –71,2 grados. Una breve visita.

Cuando los pescadores de Oymyakon, en Rusia, extraen un pez de las aguas cubiertas de hielo, bastan 30 segundos para que esté congelado: tieso como una tabla. Aquí la leche no sabe de estado líquido: sólo se vende en bloques helados de color mármol. A partir de 52 grados bajo cero dan día libre en la escuela, y el gran acontecimiento del año es el Festival del Polo de Frío. Entonces, Dschis Chan, el señor del invierno yakuto, encarnado por el profesor de gimnasia de la localidad, invita a sus colegas Padrecito Invierno de Moscú y Santa Claus de Finlandia a comer filetes de reno y a ponerse ciegos de vodka. La última vez, Santa Claus casi echa a perder la fiesta porque se bebió nada menos que 10 botellas en 48 horas para combatir el frío. Oymyakon es el polo helado de la Tierra; en 1926 alcanzó la temperatura más baja registrada jamás en territorio habitado: 71,2 grados bajo el punto de congelación. La localidad está situada en el noreste de Rusia, en una meseta a 750 metros sobre el nivel del mar: allí donde el invierno dura como mínimo nueve meses.

Pues bien, para alcanzar este lugar irreal aguantamos (es noviembre) a 34 grados bajo cero en el aeropuerto de Jakutsk, esperando a que por fin se abra la puerta del avión, que se ha congelado por completo.

El nombre Oymyakon significa “agua que no se congela” y obedece a la presencia de una fuente de aguas termales cercana que resultó ideal para la instalación de la ciudad. Además, Oymyakon se encuentra en un valle rodeado de enormes montañas que detienen el viento por completo, haciendo así que las bajísimas temperaturas resulten relativamente soportables y que en el breve verano se alcancen valores de hasta 35 grados de calor.

Lo que hasta principios del siglo XX no era más que un lugar de crianza de renos, con el apogeo del régimen soviético se convirtió en una ciudad muy bien provista, ya que las montañas de la región son sumamente ricas en oro, plata, platino y otros metales preciosos. Sin embargo, casi nada queda para la ciudad de esa riqueza mineral, y la mayoría de los pobladores de Oymyakon se encuentran apenas por encima del límite de pobreza. Por otra parte, con la caída del comunismo el interés por ese remoto enclave siberiano disminuyó notablemente, y ahora la ciudad de Oymyakon sobrevive sólo gracias a sus recursos locales, en especial la ganadería, la caza y la pesca, y además, del turismo puesto que es un destino elegido por muchos aventureros y excéntricos.

Para llegar hasta Oymyakon se debe recorrer la autopista de Kolyma, una carretera construida por orden de Stalin, donde se utilizo como mano de obra a condenados y presos políticos, muriendo miles de ellos durante la durísima construcción y que luego fueron enterrados bajo el pavimento; desde entonces la autopista de Kolyma es conocida como la “carretera de los huesos”.


Las construcciones son muy sencillas; cabañas de madera muy bien aisladas del frío exterior. A un lado de la entrada se apilan los bloques de leña para las estufas, y del otro se colocan los bloques de hielo que se utilizan en lugar del agua corriente, ya que las cañerías reventarían con el agua helada. Esto impide también que se puedan instalar baños dentro de las casas, y por lo tanto se debe a recurrir a letrinas que se encuentran a algunos metros de distancia de cada vivienda. El ingreso al hogar se efectúa a través de una antecámara en la que se guardan los alimentos que desean conservarse congelados; un verdadero freezer natural.

Los habitantes se cubren de pies a cabeza con varias capas de abrigos hechos con pieles de reno y otros animales, ya que los tejidos sintéticos, además de resultar muy caros, han demostrado ser ineficaces para poder resistir el frío de Oymyakon.

lunes, 5 de septiembre de 2011

Ocho siglos de tradición del Día de la Ciudad de Moscú

Moscú celebra su 863 cumpleaños, casi 9 siglos de historia a su espalda no es cualquier cosa, pero ¿cómo y cuándo apareció la tradición de celebrar el Día de la Ciudad?

La edad exacta de la actual capital rusa se desconoce. Como punto de partida se toma como fecha el 4 de abril de 1147, que se menciona en una crónica de 1420 como el día del encuentro del príncipe de Súzdal Yuri I Dolgoruki con sus aliados en una localidad o, más bien, una fortaleza, que se llamaba Moskov. Sin embargo, los arqueólogos comentan que las excavaciones en el territorio de la ciudad han sacado a la luz objetos que prueban que ya en el siglo XI había actividad urbana en la zona.

A principios del siglo XIII Moscú se convierte en la capital del principado y adquiere más importancia: lo prueban las crónicas de aquella época que hablan de iglesias y monasterios en la zona.

Moscú fue la capital de Rusia unida hasta el año 1712, cuando Pedro el Grande trasladó el centro político del Estado a la recién construida San Petersburgo. Sin embargo, Moscú siguió siendo el lugar de coronación de los emperadores.

Volvió a adquirir su estatus de capital sólo tras la Revolución ya en 1918. Ahí comenzó la etapa soviética en el desarrollo arquitectónico de la ciudad.

La fiesta del Día de la Ciudad se menciona por primera vez en unos documentos del año 1847. Se dice que el 1 de enero Moscú celebró su 700 aniversario con una misa festiva en el Kremlin y en las iglesias de la urbe. El centro de la ciudad fue iluminado con frases escritas con fuego, encendido en copas con grasa. Pero se dice que la mayoría no se podían leer, ya que a causa de los fuertes vientos invernales las llamas se apagaban muy rápidamente.

Pero Moscú no celebró su siguiente aniversario hasta pasados 100 años, tras la Segunda Guerra Mundial, ya en 1947. Por lo visto, las autoridades soviéticas tomaron en cuenta las peculiaridades del clima capitalino e hicieron caer la fecha del 800 aniversario en el 7 de septiembre. La ciudad fue decorada con banderas rojas, iluminaciones y retratos de los mandatarios del Estado.

Con el fin de conmemorar la fecha, comenzaron la construcción de los denominados 8 'rascacielos' de Stalin: cada uno tenía que simbolizar uno de los siglos de la historia de la capital de la URSS. Finalmente, sólo se edificaron 7 de ellos, ya que faltó financiación para el octavo -y con la muerte de Stalin en 1953 cambiaron mucho las tendencias arquitectónicas-. De estas obras la más famosa es la del cuerpo principal de la Universidad de Lomonósov en Vorobievi Gori.


Pero aquella vez tampoco se estableció la tradición de esta fiesta. Sólo en 40 años más, cuando se cumplió el 840 aniversario de la capital en 1987, empezó a celebrarse de forma más regular y siempre en septiembre.

En 1997, con el 850 cumpleaños de la capital, se proclamó la primera semana de septiembre como fecha oficial para las celebraciones del Día de la Ciudad de Moscú.

Con el paso de los siglos, las tradiciones relacionadas con esta fecha no cambiaron mucho. Sigue festejándose con iluminaciones, aunque hoy en día se emplean tecnologías mucho más avanzadas, y banderas, aunque ya no sean rojas.

Uno de los lugares preferidos para hacer la pasarela durante la Fiesta de Moscú, tanto de día como de noche, sigue siendo Arbat, la calle peatonal considerada la más antigua de Moscú. Igual que hace 23 años, es la sede de pintores callejeros que esperan poder aumentar sus ingresos gracias a que estos días el público se muestra más relajado y agradecido.

Los más románticos también intentan aprovecharse de la atmósfera festiva: organizan citas para sus parejas en los lugares más inesperados como, por ejemplo, los bancos que hay en los pasillos del metro.

Por ese mismo romanticismo, el metro, que en los días cotidianos suele ser la arteria principal del transporte público de la capital, pierde este día su función fundamental para acoger opciones alternativas.

Una de las curiosidades del festejo es que su agenda, junto con algunos eventos puramente formales, incluye conciertos, espectáculos, 'performances' y competiciones deportivas bastante atípicas. Y es difícil decantarse y decidir qué actividad es la más divertida.

Moscú celebra su aniversario


Este domingo pasado la capital rusa celebra su 864º aniversario con una amplia oferta de ocio para los moscovitas y los numerosos huéspedes de Moscú que consta de más de 700 actividades. Además de ferias, exposiciones y otras actividades tradicionales, este año Moscú se sacará de la chistera unos fuegos artificiales de impresión, además de otras sorpresas.

El acto principal tiene como escenario la Plaza Roja de Moscú, corazón de la capital, donde se darán cita más de 6.500 espectadores y unos 2.500 artistas. Por la tarde, en el marco del Festival Internacional de Orquestas Militares 'Spásskaia Bashnya', discurrirá por la plaza el desfile del regimiento presidencial y de la guardia del honor.

De noche, el edificio de la Universidad Estatal de Moscú acogerá el impactante espectáculo de láser 4D. El show permitirá a los espectadores ver con sus propios ojos rincones famosos del planeta, pasajes naturales, visitar el espacio e incluso contemplar mundos irreales. En el espectáculo participará Alain Robert, mundialmente conocido como el 'hombre-araña francés', que tiene la habilidad de trepar por las fachadas de edificios emblemáticos sin ayuda de redes, cuerdas u otros dispositivos de seguridad.

En 1997, año que Moscú celebró su 850º aniversario, la alcaldía decretó cada primer sábado de septiembre como la fecha oficial para las celebraciones del Día de la Ciudad de Moscú. Este año es la primera vez que los festejos se celebran en domingo debido a que el sábado coincidió con el Día de la solidaridad de la lucha contra el terrorismo y el aniversario de la tragedia de Beslán.