domingo, 18 de marzo de 2012

Entrevista con Nikolai Golodnikov

Se podría discutir eternamente comparando distintas características de varios aviones y hacer suposiciones sobre quién y cómo podría triunfar en un imaginario combate entre, por ejemplo, el Messerschmitt 109-E y el I-16 tipo 19. Pero lo más oportuno es ceder la palabra a los pilotos, ya que en manos de experimentados combatientes aéreos el veterano avión siempre fue una arma peligrosa. No es casual que en los duros combates de 1942 las menores bajas las sufrieran los regimientos dotados de “burritos” (así de cariñoso se hizo su apodo con el tiempo) y no los de modernos Yak y LaGG-3.

El periodista Andréi Sujorúkov ha realizado varias entrevistas a Nikolái Golódnikov, mayor-general retirado de la Fuerza Aérea. Los siguientes fragmentos tratan los aspectos técnicos del I-16, en los cuales volaron en combate los pilotos de su famoso regimiento, y que analizan sus puntos fuertes y débiles en comparación con otros aviones que pilotó durante la Segunda Guerra Mundial.

Nikolái Golódnikov es mayor-general retirado de la Fuerza Aérea, ex-piloto de caza del Regimiento de Cazas de la Guardia n.º 2 de las Fuerzas Aéreas de la Flota del Norte (GIAP VVS KSF). Este regimiento (que había sido anteriormente el regimiento mixto n.º 72 de la VVS KSF) estuvo bajo mando del famoso piloto soviético Borís Safonov, caído en 1942, y posteriormente fue nombrado Regimiento de Safonov en su honor. Nikolái luchó en este regimiento desde marzo del 1942 hasta el final de la guerra, llegando al cargo de jefe de escuadrilla. Golódnikov es un piloto as y Héroe de la URSS. En su haber personal tiene siete aviones derribados (más 8 en grupo). Durante la guerra pilotó: I-16 tipos 28 y 29, LaGG-3, MiG-1, Hurricane, P-40 Kittyhawk y Tomahawk y casi todos los tipos de P-39 Airacobra. Después de la guerra llegó a mayor-general y jefe de formación en pilotaje y tiro de la Fuerza Aérea de la flota del Norte.

Andréi Sujorúkov: ¿En qué tipo de I-16 combatió?

Nikolái Golódnikov: Cuando llegué al Norte, empecé a pilotar directamente los tipos 28 y 29 con el motor M-63. Teníamos sólo 6 unidades del tipo 29 y después de un bombardeo alemán nos quedaron dos. No nos hacían mucha falta, así que los cedimos al regimiento vecino.

A.S.: ¿Cuál es su impresión general sobre el I-16?

N.G.: El I-16 era un avión complicado, no perdonaba errores durante el pilotaje. Si te pasas un poco del límite permitido, cae en barrena. Pero también salía de cualquier tipo de barrena con facilidad. El I-16 era un avión muy maniobrable, podía realizar cualquier figura de alto pilotaje. Me encantaba ese caza.

A.S.: ¿Es verdad que se podía “realizar un viraje alrededor de un poste de electricidad” con el I-16?

N.G.: Es verdad. Era un avión único en cuanto a la maniobrabilidad horizontal.

A.S.: ¿Y la maniobrabilidad vertical?

N.G.: Todo depende del tipo del I-16, del motor. En su mayoría, con el motor M-25, era regular.

A.S.: ¿La visibilidad desde la cabina era mala?

N.G.: El I-16 tenía el morro muy grande. El motor al estar ubicado cerca de la cabina empeoraba la visibilidad. Está claro que si vas en línea recta, pierdes una parte del control visual del espacio, pero nosotros nunca volamos en línea recta, siempre volábamos realizando maniobras como “serpiente” o alabeos a la derecha o a la izquierda. Cuando te acostumbras, consigues buena visibilidad.

Los aviones de nuestro regimiento tenían carlingas cerradas, pero nosotros antes de entrar en combate siempre las abríamos. Lo hacíamos por dos razones: primero porque el cristal de la carlinga tenía muchas pequeñas grietas y el material del parabrisas era algo oscuro, por lo que la visibilidad empeoraba. Segundo, nos daba miedo que se bloqueara la parte móvil de la carlinga. Si tenías que saltar con paracaídas, podía bloquearse.

A.S.: ¿Había calefacción especial de la cabina?

N.G.: No, el calor era tomado del motor. Frío no pasábamos, pero se nos congelaba la cara. Para evitar congelación de la cara teníamos máscaras hechas de piel de topo, pero no solíamos utilizarlas, ya que molestaban durante el combate.

A.S.: ¿Había transmisor de radio en I-16?

N.G.: Los transmisores de radio empezaron a instalarse en los I-16 aproximadamente a partir del tipo 17. ¡Eran de calidad muy baja! El tanque-oscilador tenía la base de cartón y con un poco de humedad cambiaba de capacidad y todo el ajuste de la radio se iba al carajo, no se podía oír nada, sólo interferencias.

Los laringófonos eran demasiado grandes, incómodos. Irritaban mucho la piel del cuello.

Las órdenes al grupo de aviones se transmitían mediante realización de maniobras (por ejemplo, mediante alabeo), con señales de las manos, con los dedos, con giros de cabeza y etc. Si enseñabas dos dedos y luego estirabas la mano a la derecha, significaba que la pareja tiene que girar a la derecha.

A.S.: ¿El respaldo del asiento y el parabrisas eran blindados?

N.G.: El parabrisas no era blindado. Era de plexiglás. En el ataque frontal estábamos protegidos por el motor. Era el punto fuerte del I-16, en los ataques frontales era buenísimo. El I-16 tenía el respaldo y el cabezal del asiento blindados. Protegía de las balas de forma segura. Está claro que no podía proteger de los proyectiles y de las balas de gran calibre, pero es que no estaba pensado para eso.

A.S.: ¿Estaba dotado de horizonte artificial? ¿Tenia radiobrújula?

N.G.: El avión no estaba dotado de horizonte artificial ni tampoco de radiobrújula. Había un instrumento llamado “pionero”. Estaba formado por una aguja que indicaba “giro-deslizamiento” y una bolita que indicaba el alabeo “derecha-izquierda”. Analizando la posición de ambos de forma conjunta, se determinaba la posición del avión en el espacio. Este instrumento era muy seguro. Había también otros instrumentos de diversa finalidad. El panel de instrumentos del I-16 era bastante completo.

A.S.: ¿Qué tipo de mira llevaba?

N.G.: Tenía dos miras.

Una de ellas era óptica, tenía forma alargada, no me acuerdo como se llama. Era un tubo que pasaba a través de la visera y tenía dentro la cruz de mira.

Encima de este tubo se encontraba otra alza-colimador.

A.S.: ¿Estas alzas garantizaban buena puntería de tiro?

N.G.:
En nuestro regimiento abríamos fuego a partir de 50-70 metros. Desde esta distancia puedes ver los remaches, puedes disparar con cualquier alza. Desde 200 metros nunca hemos disparado, es una distancia demasiado grande.

A.S.: ¿Como era el armamento?

N.G.: El armamento era muy diverso. Los tipos 28 y 29 llevaban cañones; los tipos 10, 17 y 21, ametralladoras. Se podía intercambiar los Berezin y ShVAK entre distintos aviones.

Los ShKAS se instalaban en las alas, a veces 2 en cada ala, a veces uno. Hablamos de los tipos antiguos, 4 y 5. Eran ametralladoras de una velocidad de tiro muy alta. No eran muy fiables, ya que eran sensibles al polvo. Si disparas una ráfaga larga, la dispersión de las balas aumentaba considerablemente. Pero disparar con ráfagas largas era muy poco frecuente, lo normal era disparar con ráfagas cortas, para dañar el avión enemigo o para calcular el ángulo de tiro. El poder destructivo del ShKAS no era muy alto. Tenían buena potencia de fuego para derribar a un Bf-109E ya que el tipo E no era lo suficientemente blindado. Pero para derribar un F o un bombardero les faltaba potencia.

El tipo 10 llevaba dos Berezin sincronizados de gran calibre. Eran buenas ametralladoras porque eran potentes y fiables.

El cañón ShVAK era muy potente. Aunque los I-16 armados con estos cañones eran algo más pesados, eran buenos cazas. A veces los cartuchos de ShVAK se atascaban, pero era por culpa del personal de mantenimiento. A medida que el personal iba adquiriendo experiencia, los ShVAK pasaron a ser cañones muy seguros. Los proyectiles explosivos de ShVAK eran muy potentes. Si impactaba en el compartimiento del motor, reventaba todas las comunicaciones. Nosotros cargábamos las cintas de munición de la siguiente manera: dos proyectiles explosivos y uno perforante, o bien dos proyectiles perforantes y uno explosivo. La combinación de proyectiles dependía del tipo del objetivo a atacar. Un proyectil perforante es de acero macizo, no es trazador. Un proyectil explosivo sí es trazador.

A.S.: ¿Se instalaban los misiles RS en los I-16?

N.G.: Sí. Del calibre 57 y 82 mm. Básicamente los de 57 mm. Se colocaban dos en cada ala. No eran muy precisos, sobre todo los de 57 mm. Pero para disparar sobre concentración de objetivos eran muy eficaces. Si abres fuego a salvas contra un grupo de bombarderos, el grupo rompía la formación, se echaban para los lados. Los RS daban miedo.

A.S.: ¿Anclaban las bombas?

N.G.: En nuestro regimiento no era una práctica habitual. Enganchábamos dos bombas de 50 kg en cada ala. En nuestro regimiento normalmente volábamos con RS. Y nunca se combinaban las bombas y los RS. O íbamos con las bombas, o íbamos con los RS.

A.S.: ¿Había algún tipo de problema con los motores?

N.G.: Los motores del I-16 eran buenos y muy fiables. Puedes llegar a tu base con dos o tres cilindros dañados en combate. El motor del tipo 63 ¡era una fiera! En general, el I-16 “seguía al mando de gas”, alcanzaba la velocidad máxima en muy poco tiempo, y sobre todo con el motor tipo 63. Funcionaba bien en todas las altitudes.

A.S.: ¿El I-16 tenía hélice de paso variable?

N.G.: Sí, los tipos 29 y 28. Pero los pilotos eran bastante escépticos respecto a su uso. La hélice de paso variable va bien para un avión pesado. Los pilotos del I-16 prácticamente no utilizaban sus posibilidades, bien porque estaban convencidos de que era poco útil, o bien por alguna otra razón. El paso de la hélice se controlaba mediante cables de control, manualmente, con una palanca especial. Antes de entrar en combate los pilotos ponían menos paso de hélice y a continuación sálo trabajaban con la palanca de gas. Es la única aplicación que tuvo el paso de hélice.

A.S.: ¿I-16 era un avión muy inferior al Messerschmitt?

N.G.: Todas las versiones básicas del I-16 (tipos 10, 17, 21) en cuanto a sus características técnico-tácticas eran algo mas débiles que el Bf-109E, pero no mucho más. Las versiones más antiguas como las 4 o 5 sí eran inferiores.

Pero los I-16 del tipo 28 y 29 superaban a los Bf-109E. Tenían la misma velocidad que el Messerschmitt pero eran superiores al Bf-109E en cuanto a maniobrabilidad, incluyendo la maniobrabilidad vertical.

A.S.: ¡Que raro! Cualquier manual de aviación dice que la velocidad media del I-16 de las versiones 28 y 29 a una altitud de 3000m es de 440-460 km/h, mientras que la velocidad del Bf-109E es de 570 km/h. ¿Y usted dice que tenían misma velocidad? ¡Y la superioridad del I-16 en maniobrabilidad vertical respecto al Bf-109E es algo nuevo!

N.G.: En un combate maniobrable es raro ir a velocidad máxima, hay pocas oportunidades de aprovechar esa velocidad.

El I-16 alcanzaba fácilmente y en poco tiempo los 500 km/h, el E volaba más rápido que el I-16 pero no mucho más. Y en el combate esta diferencia entre velocidades máximas prácticamente no se notaba. La dinámica de aceleración del I-16 era espeluznante, sobre todo con el motor M-63. Ésta es su segunda importantísima cualidad después de la maniobrabilidad horizontal. El I-16 en cuanto a dinámica de aceleración era superior a todos los cazas soviéticos, incluso a los tipos nuevos. En aquel entonces el avión que más se aproximaba al I-16 en cuanto a la aceleración era el Yak-1, pero el I-16 lo superaba de todas formas.

El Messerschmitt realizaba un buen picado, se retiraba del combate rápidamente, en este aspecto era superior al I-16. El morro del “burro” era grande y en picado no podía alcanzar más de 530 km/h. Pero te diré que en el combate en caso de necesidad siempre nos retirábamos sin dificultades, igual que ellos.

A.S.: ¿Cómo se retiraban, en picado o con maniobra vertical?

N.G.: Según la situación. Lo hacíamos de ambas maneras.

A.S.: ¿Entonces cuando los héroes de la URSS V.F. Gólubev y A.L. Ivanov en sus memorias decían que el I-16 les satisfacía como avión caza hasta finales del 1942, no era mentira? ¿No era propaganda?

N.G.: No, no era mentira.

A.S.: ¿Y como estaba el I-16 en comparación con Bf-109F y FW-190?

N.G.: No tuve la ocasión de realizar muchas misiones de combate con el I-16, por tanto te comentaré la opinión de mis compañeros.

El Bf-109F y el I-16 del tipo 28 y 29 en cuanto a las características eran bastante similares, quizás algo inferiores. El resto de tipos sí eran bastante inferiores, sin duda. En el Norte, el Bf-109F empezó a entrar en servicio a gran escala a partir de septiembre del 1942; antes, básicamente se encontraban los Bf-109E. El I-16 del tipo 28 y 29 era inferior al F en cuanto a velocidad máxima y maniobra vertical, pero era superior en cuanto a la maniobra horizontal y el armamento. El F era muy fuerte en cuanto a la maniobrabilidad vertical: parece que estás a punto de alcanzarlo, pero éste activa la post-combustión y se escapa.

El FW-190 apareció más o menos en el mismo momento que el Bf-109F, aproximadamente en octubre del 1942. Era un caza muy potente. El FW-190 superaba al I-16 en todo, bueno, en casi todo, excepto en maniobrabilidad horizontal. Pero en aquel entonces ya empezaron a entrar en servicio de forma masiva los Yak y, además, los P-40 y P-39, adquiridos en régimen de préstamo con opción a compra.

A.S.: ¿El Hurricane era más fácil de pilotar que el I-16?

N.G.: Si, era más fácil. No causaba dificultades ni durante el aprendizaje ni tampoco durante el pilotaje.

A.S.: ¿Nikolái Gerásimovich, cómo era pilotar el Hurricane en comparación con el I-16? ¿Era más fácil o más difícil?

N.G.: Era necesario acostumbrarse a las peculiaridades del Hurricane. A mí me gustaba más pilotar al I-16. Aunque a principio te diré que Hurricane era comparable a un I-16 del tipo 10, 17 y 21. Pero no me gustaba el Hurricane, no le tenía cariño.

A.S.: El mariscal Zimin fue uno de los primeros que empezó a pilotar un Hurricane. En sus memorias dice que “realizar un combate aéreo pilotando un Hurricane era lo mismo que hacer un combate aéreo pilotando un terodáctilo”. Decía que el Hurricane era un avión único en cuanto a sus características aerodinámicas: no incrementa la velocidad en picado, pero la pierde momentáneamente en cabeceo. ¿No serían estos comentarios frutos de la propaganda?


N.G.: Todo esto es correcto. Era un terodáctilo. Tenía un perfil de ala grueso. La dinámica de aceleración era muy mala. En cuanto a la velocidad máxima quizás era algo más rápido que un I-16, pero mientras se tarda en alcanzar esta velocidad pueden pasar muchas cosas. Respondía a los timones sin retardo, pero las maniobras resultaban ser muy suaves y lentas. Todo lo contrario al I-16. En un I-16 tiras el mando del avión e inmediatamente haces el tonel, bruscamente. Pero ese “jorobado” era muy lento.

A.S.: ¿Nikolái Gerásimovich, si le hubieran dejado elegir entre I-16 o Hurricane para luchar en combate, usted que opción hubiera escogido?

N.G.: Por su puesto que el I-16, del mismo tipo que yo piloté: el 28. Pero nosotros no teníamos elección. Con el Hurricane realicé aproximadamente 20 misiones de combate y efectué 3 o 4 combates aéreos. Posteriormente me cambié a un P-40.

A.S.: ¿Podría comparar la dificultad de pilotar los I-16, I-15, LaGG, Hurricane y etc.?

N.G.: El más complicado de pilotar era I-16, los demás eran más fáciles. Pero el pilotaje de cada avión tiene sus particularidades y dificultades. Todo depende del nivel de cada piloto

La television

En 1911 el profesor de la Universidad Tecnológica de San Petersburgo, Borís Rózing, por primera vez en la historia mostró en la pantalla de cristal del tubo de rayos catódicos una imagen televisiva.

Borís Rózing, físico ruso nacido en 1869 en San Petersburgo, fundador de la televisión electrónica, dedicado toda su vida a la creación de sistemas de transmisión de imágenes a distancia, escribió en los años 20 del siglo XX: “Sin duda, llegará por fin el día en que la telescopía eléctrica se difundirá por todos lados y se hará un aparato tan necesario como actualmente lo es el teléfono. Así, millones de aparatos, como ‘ojos eléctricos’, van a servir en todos los aspectos de la vida pública y privada, la ciencia, la técnica y la industria…”.

“Se nos abrirán los secretos y las riquezas de la mayor parte de la superficie de nuestro planeta, que todavía está cubierta por el agua… Será posible penetrar de esa manera en desfiladeros de montañas y volcanes apagados, y echar un vistazo por dentro de la capa sólida de la Tierra.

Un médico podrá utilizar ese ‘ojo eléctrico’ para investigar las vísceras de un paciente que se encuentre a distancia. Un ingeniero podrá supervisar todo que se está haciendo en sus talleres… sin salir del despacho”. Y sus predicciones se cumplieron.

Cabe señalar que la palabra “televisión” por primera vez fue pronunciada en 1900, en el informe del físico ruso Konstantín Perski El actual estado del problema de la electrovisión a distancia (televisonamiento) en el IV congreso electrotécnico internacional celebrado en París, Francia.

Las investigaciones de Rózing estaban basadas en varios descubrimientos anteriores. En particular, en 1880 el científico ruso Porfiri Bajmétiev, conocido como físico y biólogo, ofreció una idea para un sistema televisivo, teóricamente posible, al que llamó “telefotógrafo”. Su mérito fue que, aunque no construyó un aparato, planteó el primero de los principios fundamentales de la televisión: la descomposición de una imagen en elementos separados para la transmisión consecutiva a distancia (de forma independiente una idea similar la formuló el portugués Adriano de Paiva). Uno de los más importantes inventos para el trabajo de Rózing fue el fotoelemento, creado por el profesor de la Universidad de Moscú Alexandr Stolétov. En 1888-1889 este avance hizo posible la conversión de la energía de la luz en la energía eléctrica.

En 1907 Borís Rózing propuso y patentó tanto en Rusia como en el extranjero, la idea que sin cambios significativos ha llegado hasta los televisores modernos. Fue el primero en utilizar la electrónica para transmitir una imagen a distancia. Llamó al proceso “telescopía eléctrica”.

El físico inició el trabajo sobre el “telescopio eléctrico” en 1897. El científico trabajaba sobre su proyecto en sus escasas horas libres, pues por su ocupación principal tenía que dar conferencias y dirigir cursos prácticos en tres centros docentes superiores de San Petersburgo y además participar en eventos académicos como miembro de varias sociedades científicas. Le ayudaba su amplio conocimiento científico y el interés por los últimos alcances de la electrotécnica (publicó durante muchos años reseñas de publicaciones extranjeras en la revista Electricidad).

Para aquel entonces ya se había presentado en varios países el componente electrónico denominado fotorresistencia de selenio y diversos proyectos de sistemas televisivos basados en más o menos complicados aparatos mecánicos para la exploración de la imagen, pero las ideas nunca se habían llevado a la práctica.

El inventor dedicó varios años a realizar experimentos con los sistemas mecánicos de transmisión de imágenes y llegó a la conclusión de que un sistema televisivo práctico debe basarse en “el cambio de los mecanismos materiales inertes por los dispositivos no inertes” (o electrónicos).

Para emplear esta idea, Rózing estudió los principios del funcionamiento del oscilógrafo con el tubo de rayos catódicos. Rózing utilizó el tubo de rayos catódicos, creado por el británico William Crookes y desarrollado por el científico alemán Ferdinand Braun. Aunque se transformó con el tiempo, este dispositivo todavía es la base para la técnica televisiva de monitores de ordenador, televisores y osciloscopios, aunque en la actualidad se están sustituyendo por tecnologías como plasma, LCD o LED. La pantalla de los televisores no es nada más que el extremo ensanchado de este tubo.

Al observar cómo el rayo electrónico “dibuja” complicadas figuras lucientes en su pantalla, el inventor pensó que el tubo podía ser empleado para la reproducción de las imágenes en un sistema de televisión. Posteriormente Rózing escribió: “el haz catódico es aquella ‘pluma’ ideal no inerte que por la misma naturaleza está destinada para ser empleada en el receptor del telescopio eléctrico”.

Rózing perfeccionó el tubo catódico, encontrando un método de modulación de la intensidad del haz de electrones del tubo, es decir, del cambio de la cantidad de electrones en pantalla de acuerdo con el cambio del brillo de los elementos de la imagen transmitida. Así el tubo del oscilógrafo se convirtió en el tubo del televisor.

En cuanto al transmisor, Rózing buscó un método de conversión no inerte de la imagen en señales eléctricas. En vez de la fotorresistencia de selenio, que tenía una gran inercia, propuso un fotoelemento alcalino con fotoefecto externo.

Su prioridad en la elaboración de un nuevo sistema televisivo se fijó en las patentes solicitadas en 1907 y obtenidas en 1908-1910 en Rusia, Alemania y Reino Unido. Así, a diferencia de otros inventores en este campo, Rózing logró no solamente inventar, sino también hacer su idea realidad.

El 9 de mayo de 1911 Boris Rózig realizó lo que posteriormente se consideraría la primera transmisión televisiva, pues ninguno de los predecesores del inventor ruso había logrado demostrar cómo funcionaban sus ideas y transmitir aunque fuera la imagen más simple. Rózig transmitió una imagen de una reja compuesta de cuatro líneas, colocada frente al objetivo del transmisor. Este fue el primer paso en el camino del uso práctico de la televisión electrónica.

Teniendo en cuenta el nivel de desarrollo de los dispositivos electrónicos de principios del siglo XX, se puede afirmar que la recepción en la pantalla del tubo catódico de imágenes simples estáticas fue un gran alcance científico y tecnológico.

La Sociedad Rusa de la Técnica destacó la contribución de Borís Rózing en el desarrollo de la telescopía eléctrica, galardonándolo en 1912 con la medalla de oro y con el premio de Karl Siemens, el emérito miembro de la sociedad. En los años posteriores Rózing continuó desarrollando su invento.

La época de la televisión electrónica llegó dos décadas más tarde, y la hicieron realidad otros ingenieros, entre ellos muchos discípulos de Borís Rózing. El mismo inventor durante varios años no pudo continuar sus investigaciones. Tras la Revolución y la guerra civil en Rusia, en 1924 le ofrecieron el puesto de jefe colaborador científico en el Laboratorio Experimental Electrotécnico de Leningrado, donde realizó varios experimentos de grabación de sonido y desarrolló dispositivos de apoyo a invidentes. Rózing murió en 1933 en el norte de Rusia en el exilio.

Sus alumnos continuaron sus investigaciones. Su más famoso discípulo, Vladímir Zvorykin, hizo sus más reconocidos inventos en la emigración, en EE.UU. Al crear en 1931 el kinescopio (el tubo receptor), y luego en 1933 el iconoscopio (transmisor), que aumentó la cantidad de los elementos en la pantalla en cientos de veces, hizo posible el desarrollo de la televisión en EE.UU.

Pero ya el 26 de julio de 1928 en Tashkent, Uzbekistán, URSS, el físico Borís Grabovski por primera vez en la historia logró transmitir sin cables una imagen en movimiento con la ayuda de un sistema de televisión electrónica. Llamó a su invento “telefot”.

Semión Katáyev, ingeniero soviético, es otra persona que contribuyó considerablemente al desarrollo de la televisión. En 1929 patentó “el dispositivo para telescopía eléctrica en colores naturales” (los colores se reproducían en serie con un tubo catódico y formaban una imagen multicolor en la pantalla). Solicitó la patente para el iconoscopio 1,5 meses antes de que lo hiciera Zvorykin en EE.UU.

También Katáyev, que se considera uno de los “padres” de la televisión nacional, además de perfeccionar el iconoscopio, ofreció por primera vez el estándar de la transmisión de 625 líneas. Entre sus ideas más brillantes destaca la expresada en 1957 sobre el uso de satélites artificiales para la transmisión a grandes distancias

Historia de la URSS

El territorio del País de los Soviets, que se extiende desde el Mar Báltico hasta el Océano Pacífico y desde el Océano Glacial Artico hasta el Mar Negro, ha estado habitado desde tiempos inmemoriales. El período mas antiguo de su historia se ha reflejado unicamente en las fuentes arqueológicas. En la URSS se estudiaron muchas fuentes. Las mas antiguas se han encontrado en el territorio de la RSS de Armenia, así como en el territorio de Gorny Altái (a orillas del río Ulalinka) y en la región del Amur (cerca del pueblo de Kumary). Son toscos útiles de piedra pertenecientes a la llamada época chelense, separada de la nuestra por un período de 400.000 a 100.000 años.
Montañas de Tian-Shan

La época siguiente, es decir, la achelense (paleolítico inferior) está representada en el territorio de la URSS por un gran número de hallazgos en el litoral caucáseo del Mar Negro, en Osetia, en varios lugares de Ucrania, en el litoral turkmeno del Mar Caspio y en Kirguizia (montañas del Tian- Shan).
A finales de la época achelense cambió bruscamente el clima en todo el globo terrestre. Comenzó la época de los grandes glaciares. En Europa Oriental, el glaciar llegó hasta el curso medio del Dniéper y del Don. La tundra, aherrojada por la congelación perpetua, avanzó sobre los feraces campos de la actual Ucrania. Lo mismo sucedió en enormes extensiones del continente asiático. Desaparecieron las anteriores flora y fauna. Se extinguieron o se desplazaron hacia el Sur los animales que no resistían el frío.

Idéntica repercusión tuvieron los cambios de clima en la vida del hombre primitivo. Sin embargo, en la lucha contra las duras condiciones de la naturaleza, el hombre, además de defender su porvenir, supo adaptarse al nuevo ambiente y poblar enormes extensiones antes deshabitadas.

Ya en las estaciones achelenses tardías descubiertas en territorio soviético se encuentran por doquier huellas de fuego, indicio de que el hombre de aquella época, cabe suponer, desconocía aún los procedimientos para hacer fuego, pero sabía utilizarlo y guardarlo. En la época siguiente, es decir, en la musteriense, separada de nuestros días por un espacio de 100.000 a 40.000 años, segun ciertos vestigios, ya se conoció el modo de hacer fuego.



En numerosos lugares de la URSS se han descubierto materiales de la época musteriense, que dan testimonio de sensibles progresos en la producción de utensilios.

Perteneciente a dicha época, además, los primeros sepulcros descubiertos en territorio soviético, que permiten formarse cierta idea del aspecto que tenían los antiguos habitantes del país. Uno de estos sepulcros (de un niño de 8 ó 9 años) se descubrió en 1938, en Asia Central, en la gruta de Teshnik-Tash. El aspecto del niño coincide enteramente con el tipo antropológico neandertalense, característico de la época musteriense. En las épocas arqueológicos posteriores, del paleolítico superior, ese tipo desaparece enteramente, dando paso al hombre cuya estructura física se distingue poco del moderno. Entonces se perfilan ya en el globo terrestre los tipos raciales mongoloide, europeoide y negroide. La población antigua del territorio de la URSS está representada por los dos primeros tipos.

En la época del paleolítico superior (hace de 40.000 a 14.000 años), las condiciones climatológicas y naturales de las extensiones que integraron la Unión Soviética eran rigurosas, pese a la paulatina reducción del manto glacial. Pero, ello no impidió el aumento de la población. Hoy se conocen ya estaciones del paleolítico superior en todo el territorio del país, desde Crimea y el Caúcaso hasta Yakutia y más allá cel Círculo Polar.


La principal fuente de existencia del hombre del paleolítico superior seguía siendo la caza. El empleo de armas mas perfectas y trampas, así como las grandes batidas, elevaron el rendimiento de dicha actividad. Según muestran los estudios de campamentos del paleolítico superior, los cazadores capturaban, a veces, rebaños enteros de mamuts. A orillas de los ríos y lagos fue prosperando poco a poco la pesca. Fueron creándose las condiciones para una vida mas sedentaria.

Cabe admitir que entonces naciera una nueva forma de organización social del hombre primitivo. Los esfuerzos mancomunados para conseguir alimentos, la vivienda común y el hogar común imponían la necesidad de agrupaciones, mas estables que la horda primitiva o la manada. Esa nueva agrupación, basada en vínculos de parentesco sanguíneo, fue la comunidad gentilicea matriarcal, la mas antigua forma de regimen gentilicio. La línea femenina era la única que permitía determinar el parentesco en el régimen de matrimonio comunal, típico de las primeras fases del desarrollo de la humanidad en todo el globo terrestre. La situación predominante de la mujer era debida a si papel en la vida económica. La recolección de plantas, la conservación del fuego en el hogar común, la preparación de la comida, el acopio de reservas, la confección de ropa y la participación activa en la caza aseguraron durante mucho tiempo el papel dirigente de la mujer en la sociedad gentilicia primitiva.

El final de la época del paleolítico superior y principios del mesolítico o período medio de la Edad de Piedra (XIV-IV milenios ) coincidieron con el fin del período glacial. El clima volvió a cambiar sensiblemente, se hizo menos frío. Los espacios que se liberaban de los hielos comenzaron a cubrirse de bosques: en el Norte, coníferos: mas al Sur, conífero-foliáceos y foliáceos; en el Sur se formaron estepas parecidas a las actuales. Aparecieron nuevas especies de animales: en la zona de los bosques, el alce, el ciervo, el jabalí, el castor, el oso pardo, etc., en las estepas, el saigá, el caballo y el onagro. Los últimos mamuts terminaron su existencia en las latitudes septentrionales de Siberia.




Los campamentos mesolíticos en territorio soviético, así como en el resto del mundo, han sido estudiados menos que las moradas del hombre de las épocas anteriores y posteriores. Ello se debe a que los cazadores del mesolítico no paraban mucho en un mismo lugar. Se desplazaban hacia el Norte, siguiendo al reno y otros animales septentrionales con los que llevaban milenios de convivencia y poblando nuevas tierras en la medida que éstas se iban desprendiendo de la coraza glacial, hasta llegar al litoral ártico, donde en el río Pechora se descubrieron en 1964-1967 útiles de silex de la época musteriense.

viernes, 16 de marzo de 2012

Poema sobre Rusia.



En trenes poseídos de una pasión errante
por el carbón y el hierro que los provoca y mueve,
y en tensos aeroplanos de plumaje tajante
recorro la nación del trabajo y la nieve.

De la extensión de Rusia, de sus tiernas ventanas,
sale una voz profunda de máquinas y manos,
que indica entre mujeres: Aquí están tus hermanas,
y prorrumpe entre hombres: Estos son tus hermanos.

Basta mirar: se cubre de verdad la mirada.
Basta escuchar: retumba la sangre en las orejas.
De cada aliento sale la ardiente bocanada
de tantos corazones unidos por parejas.

Ah, compañero Stalin: de un pueblo de mendigos
has hecho un pueblo de hombres que sacuden la frente,
y la cárcel ahuyentan, y prodigan los trigos,
como a un inmenso esfuerzo le cabe: inmensamente.

De unos hombres que apenas a vivir se atrevían
con la boca amarrada y el sueño esclavizado:
de unos cuerpos que andaban, vacilaban, crujían,
una masa de férreo volumen has forjado.

Has forjado una especie de mineral sencillo,
que observa la conducta del metal más valioso,
perfecciona el motor, y señala el martillo,
la hélice, la salud, con un dedo orgulloso.

Polvo para los zares, los reales bandidos:
Rusia nevada de hambre, dolor y cautiverios.
Ayer sus hijos iban a la muerte vencidos,
hoy proclaman la vida y hunden los cementerios.

Ayer iban sus ríos derritiendo los hielos,
quemados por la sangre de los trabajadores.
Hoy descubren industrias, maquinarias, anhelos,
y cantan rodeados de fábricas y flores.

Y los ancianos lentos que llevan una huella
de zar sobre sus hombros, interrumpen el paso,
por desplumar alegres su alta barba de estrella
ante el fulgor que remoza su ocaso.

Las chozas se convierten en casas de granito.
El corazón se queda desnudo entre verdades.
Y como una visión real de lo inaudito,
brotan sobre la nada bandadas de ciudades.

La juventud de Rusia se esgrime y se agiganta
como un arma afilada por los rinocerontes.
La metalurgia suena dichosa de garganta,
y vibran los martillos de pie sobre los montes.

Con las inagotables vacas de oro yacente
que ordeñan los mineros de los montes Urales,
Rusia edifica un mundo feliz y trasparente
para los hombres llenos de impulsos fraternales.

Hoy que contra mi patria clavan sus bayonetas
legiones malparidas por una torpe entraña,
los girasoles rusos, como ciegos planetas,
hacen girar su rostro de rayos hacia España.

Aquí está Rusia entera vestida de soldado,
protegiendo a los niños que anhela la trilita
de Italia y de Alemania bajo el sueño sagrado,
y que del vientre mismo de la madre los quita.

Dormitorios de niños españoles: zarpazos
de inocencia que arrojan de Madrid, de Valencia,
a Mussolini, a Hitler, los dos mariconazos,
la vida que destruyen manchados de inocencia.

Frágiles dormitorios al sol de la luz clara,
sangrienta de repente y erizada de astillas.
¡Si tanto dormitorio deshecho se arrojara
sobre las dos cabezas y las cuatro mejillas!

Se arrojará, me advierte desde su tumba viva
Lenin, con pie de mármol y voz de bronce quieto,
mientras contempla inmóvil el agua constructiva
que fluye en forma humana detrás de su esqueleto.

Rusia y España, unidas como fuerzas hermanas,
fuerza serán que cierre las fauces de la guerra.
Y sólo se verá tractores y manzanas,
panes y juventud sobre la tierra.


EL HOMBRE ACECHA
(1937-1939)

martes, 13 de marzo de 2012

Ёжик в тумане. Русские сказки/ cuentos rusos/ Russian Tales

ЁЖИК В ТУМАНЕ
Юрий Норштейн, Сергей Козлов
иллюстрации Франчески Ярбусовой
Изд. «Красная площадь»


По вечерам Ёжик ходил к Медвежонку в гости считать звёзды.
Они усаживались на брёвнышке и, прихлёбывая чай, смотрели на звездное небо.
Оно висело над крышей, прямо за печной трубой.
Справа от трубы были звёзды Медвежонка, а слева — Ёжика.


Сначала Ёжик шёл полем, где его окружила стайка ночных Бабочек-Подёнок, потом вошёл в сосновый лесок.
А когда вышел, за ним уже крался Филин, растопырив крылья.
Но Ёжик его не заметил.
Он нёс Медвежонку малиновое варенье и смотрел в небо.
«Звезда!» — вдруг остановился Ёжик.
Филин чуть не налетел на него и тоже уставился в небо.
«И в луже Звезда…» — сам себе сказал Ёжик, увидев её отражение

 Филин тоже наклонился над лужей, но ничего, кроме себя, не увидел и, рассердившись, взрыхлил своей мохнатой лапой воду

 
А Ёжик уже глядел в тёмный старый колодец.
«Угу!» — крикнул Ёжик.
«Угу-у-у!» — загудел в ответ старый колодец.
Ёжик спрыгнул на землю и на ходу гукнул, словно бросил камушек: «У-гу!».
И Филин, проходя мимо колодца, тоже крикнул: «Угу!..» и остановился, удивленный.
Колодец и ему ответил: «Угу-у-у-у-у!».
Филин взгромоздился на сруб колодца и снова крикнул: «Угу!».
И колодец в ответ, гулко: «Угу-у-у-у-у-у-у…».
Филин хихикнул и они заухали, прислушиваясь друг к другу — Филин и старый колодец.


А Ёжик со своим узелком уже семенил дальше, сам про себя беседуя с Медвежонком:
«А я ему скажу: „А я тебе малиновое варенье принёс”.
А он мне скажет: „Вот и самовар простыл, надо бы веточек подбросить… этих… ну как их… можжевеловых!”
А я ему скажу… а я ему скажу… а я е-му ска-жу…».
И вдруг застыл.

Прямо перед ним из тумана выплыла белая Лошадь.
«А интересно, — подумал Ёжик, — если Лошадь ляжет спать, она захлебнётся в тумане?»

И он стал медленно спускаться с горки, чтобы попасть в туман и посмотреть, как там внутри.
«Вот, ничего не видно. И даже лапы не видно».
«Лошадь!» — позвал Ёжик.
Но Лошадь ничего не сказала.


И тут на Ёжика обрушился сухой Лист.
Ёжик от испуга закрыл лапами глаза… а когда выглянул… из под Листа, таинственно покачивая своим домиком, уплыла в туман Улитка…

Ёжик опасливо приподнял сухой Лист…
И совсем рядом услышал дыхание:
«А-ха, а-ха!» — вздымая боками и раздуваясь до неба, задышал Слон. Или это был не Слон?
Ёжик аккуратно положил Лист на место и, пятясь, на цыпочках, ушёл в туман.
А из тумана выглянула большая, добрая голова Лошади. Голова вкусно пофыркивала и хрумтела травой.

«Фр-р-р!» — вздохнула лошадиная голова и сухой Лист, как живой, взметнулся и отполз в сторону.
Где-то вдали зазвенело и вдруг — «В-з-з-з!» — над головой Ёжика прянула и мгновенно пропала Летучая Мышь.
Ёжик даже не успел перепугаться, а вокруг него затрепетала, засеребрилась легкая стайка ночных Бабочек-Подёнок.

«Хе-хе-хе-хе-хе!» — передразнил Ёжик и даже пробежал следом за ними, подпрыгнул, замахал лапами, представив себя ночной Бабочкой, но вдруг замер, прижав узелок…
Из тумана, как из форточки, выглянул Филин, ухнул: «Угу! У-гу-гу-гу-гу-гу!..» и растворился в тумане.

«Псих», — подумал Ёжик, поднял сухую палку и, ощупывая ею туман, двинулся вперед.
Палка, как слепая, блуждала в темноте, пока не упёрлась во что-то твёрдое.
«Тук-тук!» — постучал Ёжик.
Положил узелок и, перебирая по палке лапами, увидел перед собой дерево с огромным дуплом.
«А-га!» — осторожно выдохнул в дупло Ёжик.
«А-а-а-а!» — загудело дерево. Ёжик попятился и вдруг вспомнил про узелок.

Он метнулся назад, обежал дерево, крутнулся на месте… Узелка не было. Дерево медленно заволокло туманом. Ёжик остался один.
«Ё-ёж-и-и-и-и-к!» — будто с края земли донёсся чей-то крик.
Туман сгущался вокруг Ёжика.
Ёжик сорвал травинку, на которой сидел Светлячок, и, высоко подняв её над головой, как со свечой, наклоняясь и вглядываясь себе под ноги, побрёл в тумане.

Деревья, как мачты, тонули во мгле. Светлячок — маленький зеленый маяк — еле-еле теплясь, покачивался в тумане, освещая дорогу.
Но и он упал в траву и погас. Стало совсем темно.
Туман закружился вокруг Ёжика. И Ёжик побежал. Ему казалось, что из тумана за ним несётся огромная Улитка, Летучая Мышь, Филин… задышал Слон, обрушился Лист с дерева.

Ёжик упал в траву и закрыл лапами голову.
Но тут из тумана появилась Собака. Она положила перед Ёжиком узелок, зевнула во всю собачью пасть и пропала в тумане.

Издалека донёсся голос Медвежонка:
«Ё-ёжи-и-и-и-ик!».
«О-го-го-го-го!» — рванулся на крик Ёжик, но — бул-тых! — упал в воду.

«Я — в реке, — похолодел от страха Ёжик и, немного погодя, решил, — пускай река сама несёт меня».
Он глубоко вздохнул и река понесла его вниз по течению.
Высоко в небе горели звёзды, над ним проплыла голова Лошади, где-то далеко тоненько играла балалайка…

«Я совсем промок. Я скоро утону», — подумал Ёжик.
Вдруг кто-то дотронулся до его задней лапы.
«Извините… — беззвучно спросил Кто-то, — кто Вы и как сюда попали?»
«Я — Ёжик, — тоже беззвучно ответил Ёжик, — я упал в реку».

«Тогда садитесь ко мне на спину, — беззвучно проговорил Кто-то, — я отвезу Вас на берег».
Ёжик сел на чью-то широкую скользкую спину и через минуту оказался на берегу.

«Спасибо!» — вслух сказал Ёжик.
«Не за что!» — беззвучно сказал Кто-то, кого Ёжик даже не видел, и пропал в волнах.


Ёжик с узелком сидел на брёвнышке и смотрел прямо перед собой остановившимися глазами.
Послышались чьи-то торопливые шаги.
«Ёжик! Где же ты был? — плюхнулся рядом запыхавшийся Медвежонок, — я звал, звал, а ты не откликался!..»
Ёжик ничего не сказал. Он только чуть скосил глаза в сторону Медвежонка…
«Я уже и самовар на крыльце раздул, креслице плетёное придвинул, чтобы удобнее звёзды считать было… вот, думаю, сейчас придёшь, сядем, чайку попьём, с малиновым вареньем, ты ведь малиновое варенье несёшь, да? А я и самовар раздул и веточек этих… как их?..»
«Мож-же-ве-ло-вых», — медленно подсказал Ёжик.
«Можжевеловых! — Обрадовался Медвежонок, — чтобы дымок пах… И… и… и… и в… и в… ведь кто же, кроме тебя, звёзды-то считать будет?!»

Медвежонок говорил, говорил, а Ёжик думал:
«Всё-таки хорошо, что мы снова вместе».
А ещё Ёжик думал о Лошади:
«Как она там, в тумане?..»

Было тихо.
В ночном небе ярко горели звезды.
Филин переговаривался с колодцем.
«Угу-у!» — говорил Филин.
«Угу-гу-гу-гу-гу-гу!» — отвечал ему Колодец.

«Угу-у!» — кричал Филин.
«Угу-гу-гу-гу-гу-гу!» — гудел Колодец.

«Угу-у!»
«Угу-гу-гу-гу-гу-гу!»
«Угу-у!»
«Угу-гу-гу-гу-гу-гу-у-у!»